Antes de relatar los pormenores de mi aventura balcánica, quiero hablaros de todas aquellas cosas que todos los españoles que hemos vivido fuera de España echamos de menos sobre nuestro país. Por más que lo critiquemos mientras estemos aquí, nos quejemos del aburrimiento mortal de una cosa u otra o nos avergoncemos de ciertas situaciones, siempre siempre siempre nos faltarán: 1. Las persianas. Nunca entenderé cómo un invento tan simple, tan genial, tan barato NUNCA existe fuera de nuestro país. ¡Si hasta quita calor! Me he encontrado con contraventanas, con cortinas translúcidas, con cristales opacos, o incluso la nada más absoluta. ¡Encima en países donde amanece a las 5 de la mañana! Vamos a ver, que yo entiendo que no exportemos frutas tropicales, pero las persianas... Es algo que no entenderé jamás. 2. El jamón. Por muy buena que sea la comida local, un español siempre extrañará el jamón. Puede que también la tortilla de patatas de su abuela, el queso de su pueblo o el vino ...
Lo que empezó siendo un viaje por México, acabó siendo un viaje por la vida. ¡Vive! ¡Viaja! (si quieres)